Archivo de la categoría: Música

La Rosa

Estándar

Esta es mi pequeña aldea,
un lugar cada día igual. 
Con el sol se levantan todos 
despertando así…

– Bonjour
– Bonjour
– Bonjour

Ya llega el panadero como siempre 
su mismo pan viene a vender… 
Desde el día en que llegué 
todo sigue igual que ayer, 
nada nuevo que contar. 

– Panadero: Bella ¿qué tal?
– Bella: Bonjour monsieur 
– Panadero: ¿A dónde vas?
– Bella: A la librería, acabo de leer un cuento maravilloso. Trata de unas habichuelas y un ogro…
– Panadero: Calla, Marie las baguettes, rápido

– Mujeres: Una muchacha de lo más extraño
siempre en las nubes suele estar…
– Mujer: Nunca está con los demás.
– Hombre: No se sabe a dónde va.
– Todos: Nuestra Bella es una chica peculiar.

– Hombre: Bonjour
– Mujer: ¿Qué tal?
– Hombre: ¿Y su familia?

– Mujer: Bonjour
– Hombre: ¿Qué hay?
– Mujer: ¿Y su mujer?

– Mujer: Pues seis no tres
– Hombre: Eso es muy caro

– Bella: Yo sé que existe un mundo para ver. 

– Librero: ¡Ah, Bella!
– Bella: Buenos Días, aquí le traigo el libro que me prestó. 
– L: ¿Ya lo has leído?
– B: No podía dejarlo, ¿ha llegado algo nuevo? 
– L: jeje ¿desde ayer? no.
– B: No importa. Me llevaré mmm… este. 
– L: ¿Este? ¡Si lo has leído dos veces!
– B: Pero es mi preferido, lugares lejanos, aventuras, hechizos mágicos… ¡un príncipe disfrazado!
– L: Si tanto te gusta puedes quedártelo
– B: Pero señor…
– L: Insisto
– B: Pues gracias, muchísimas gracias. 

– Hombres: Ahí va esa joven tan extravagante
que nunca deja de leer.
– Mujeres: Con un libro puede estar
– Hombres: 7 horas sin parar
– Todos: Cuando lee no se acuerda de comer…

– Bella: Ahh! Es un gran romance… 
el apuesto príncipe llegó… 
y como está encantado… 
¡ella no descubre quien es él 
hasta el final…! 

– Mujer: También su nombre dice que ella es bella
es más bonita que una flor…
– Hombre: No debemos olvidar
que esa chica es singular.
Muy distinta a todos los demás
– Todos: No es como todos los demás,
distinta a todos los demás…,
no hay dos…

– Lefou: ¡Caray!
No has fallado ni un tiro Gastón.
Eres el mejor cazador del mundo.
– Gastón: Ya lo sé
– L: No hay bestia que se salve contigo.
Ni tampoco ninguna mujer.
– G: Es cierto Lefou, ya le he echado la vista encima a esa.
– L: ¿La hija del inventor?
– G: La misma, la afortunada que se casará conmigo, la muchacha más bonita.
– L: Ya lo sé pero…
– G: Eso la hace la mejor, ¿y acaso yo no merezco lo mejor?
– L: Pues claro que sí, pero con…
– G: En el momento en que la vi me dije
ya no me puedo equivocar..
Ella es digna de lucir
la belleza que hay en mi
y conmigo va a tenerse que casar…

– Tres chicas: Mirad, es él, menuda boca
Monsieur Gastón y qué mentón
Y qué nariz, nos tiene locas
No existe un ser mas guapo y mas ligón.
– Hombre1: Bonjour
– Gastón: Perdón
– Hombre2: ¿Qué tal?
– Hombre1: Así así
– Tendera: Salchichas frescas
– Mujer comprando: ¿A cuánto van?
– Hombre3: ¿A quién?
– Mujer: Azul
– Gastón: Perdón
– Tendero: No sé si hay más
– Gastón: Dejen pasar
– Panadera: El pan
– Hombre: Azul
– Panadera: De ayer
– Hombre: Que horror
– Hombre: Ni hablar señor
– Bella: ¿Podrá la vida 
darme algo más?
– Gastón: Serás mi esposa pronto lo verás…

– Todos: Una muchacha de los más extraño
Siempre en las nubes se la ve…
Diferente a las demás
Ella baila a su compás
Otra igual no existe en la región
No hay otra igual en la región
No hay otra en toda la región…
Bella es….

vidriera

InterStella 5555

Estándar

Con unos 12 o 13 años de edad vi mi primer vídeo de Daft Punk y me quedé flipada con aquellas criaturas azules creadas por Leiji Matsumoto. Cantaban «One more time» y después de haber pasado tanto, tanto, taaaaanto (bueno, no tanto) tiempo (sigo joven y guapa) la canción sigue siendo un temazo de principios del s.XXI (¿a que parece un montón dicho así?) y sigue haciéndonos mover nuestros traseros mientras cantamos la letra más simple jamás escrita (bueno, después del «jlfajvfyqbvfphybw chacarrón macarrón») pero que pegadiza y molona lo es un cacho.

Pues bien, hoy me he propuesto revivir esa serie de vídeos, que componen la película Interstella 5555, que no es sino los clips de las canciones del álbum Discovery. Todo comienza, como no, con One more time.

The Story of the Secret Star System:
1. One More Time
2. Aerodynamic
3. Digital Love
4. Harder, Better, Faster, Stronger
5. Crescendolls
6. Nightvision
7. Superheroes
8. High Life
9. Something About Us
10. Voyager
11. Veridis Quo
12. Short Circuit
13. Face to Face
14. Too Long

dp

Corazón de León

Estándar

¿Les he dicho ya que estoy enamorada de ‘Of Monsters and Men’, basándome en una de sus canciones he hecho este cuento, porque la escuchaba y pensaba en esta historia, imaginaba como un rey y su Lionheart se unían y separaban por culpa del infortunio.

Corazón de León

Hay amantes que cantan halagos a través de una lira, otros que se miran y embelesan en las alturas de un balcón y también hay amantes que, por pena o por fortuna, mueren a causa de su amor.

El verano fue angosto, la guerra había llegado, el Rey reclamaba la soberanía de las tierras del norte, donde se alzaba valiente el pueblo de los Leones. Sus cabelleras siempre ondeando al viento, sus armas afiladas, su fuerza daba terror.

Lina era la guía de aquel pueblo libre y su corazón era frío como el hielo, sus manos fuertes como ramas y su voz era más tenaz que el rugido de un león. Encabezaba la marcha, ésta sería la decisiva, pues muchos hombres habían caído ya de ambos bandos, el destino de los pueblos se decidiría en esa batalla.

Había sido una guerra de muchos años, muchos años de muerte y muchas muertes de inocentes, y quién comenzó aquella contienda.

Veinte años atrás León Borngrab, el nacido entre los rugidos de la noche, hijo del honorable Rey Meildton desertó de su posición y amenazó al Rey, su hermano menor Meildton II. Llevaba en las venas la sangre de su madre, Lenora la dama del sur, conocida en muchos reinos no sólo por su hermosura sino también por el brío de sus actos y sus palabras, defendía su condición como defendía a su pueblo.

Lina era su vivo retrato, hermosura y bravura en un mismo cuerpo, pero el corazón se hace débil si alguien consigue alcanzarlo. La compañía se estableció ante las puertas de la ciudadela, al amanecer la guardia real abriría sus puertas y atacaría al pueblo libre, comenzaría el fin de la gran guerra: morirían hombres libres y valientes o soldados nobles leales a su rey.

Por la noche, mientras todos dormían, el capitán de la guardia, hijo adoptivo del rey, se escabulló a través de la muralla hacia la playa, donde se encontraría con su amada. Recordó a aquel que desertó de su posición, el instigador de esa guerra, pero quién puede resistirse a los designios del corazón. Había sido un hijo tierno, un capitán compasivo y un soldado virtuoso, pero era también un amante en la sombra, un amante prohibido, un amante prófugo, un traidor.

Allí estaba ella, con su melena al viento, sus pies en la orilla del mar, la blanca espuma empapando los bajos de su falda rala. Vestida de doncella no parecía un guerrero, debían matarse y eso lo sabían pero de noche se amaban, sólo la luz de la luna los protegía.

Se abrazaron y entre suspiros escuchó de sus labios la trayectoria que su amor tomaría: Yo soy y el león y tú eres la distancia entre mi presa y yo. Antes de besarse, antes de separarse, antes del amanecer y la muerte, él contesto: Yo soy un Rey y tú un Corazón de León.

Salió el sol como un torrente, bañó de luz el campo de batalla y antes de que se alzara al mediodía, el pueblo libre de hombres como leones se alzó vencedor. El capitán y futuro rey murió a manos de Lina, que sería proclamada auténtica reina, heredera de Lenora, desposada con Meildton, de aquel territorio.

Pero la joven reina murió, no por envenenamiento ni tampoco por lesión, fue su corazón de león la que la llevó a su perdición. Esperó a la noche, a la última luna de su amor y bajo la protección del astro lunar se lanzó al vacío, desde un acantilado al mar.

Había matado a su amado, que era a la vez su adversario. Él sujetó su mano, clavó la daga de ella en el estómago y murió para que ella triunfara. Se unieron de la peor forma pensada, de nada sirvió la batalla pues los que serían reyes estaban ahora, en su tumba de agua salada.

Tú eres mi Rey y yo tu Corazón de León -fueron sus últimas palabras.